Las democracias se deben esforzar por proteger los derechos de las mujeres, fomentar la participaci�n de la mujer en todos los aspectos de la sociedad y del gobierno, y crear lugares donde las mujeres puedan asociarse con libertad y expresen sus opiniones en forma abierta.
Entre los derechos jur�dicos de la mujer figuran la igualdad en la representaci�n ante la ley y en el acceso a los recursos legales.
Los derechos de la mujer deben ser expuestos con claridad: la ambig�edad de la condici�n jur�dica de las mujeres sigue siendo una de las causas principales de la pobreza en todo el mundo.
Las mujeres deben tener derechos de propiedad y de sucesi�n hereditaria.
Las mujeres deben tener oportunidad de tomar parte en la redacci�n e implementaci�n de las constituciones y la legislaci�n.
Entre los derechos pol�ticos de las mujeres figuran: votar en las elecciones, contender por cargos p�blicos, participar en el gobierno y organizarse pol�ticamente.
Las democracias deben dar su apoyo a las iniciativas de la sociedad civil�p�blicas y no gubernamentales�cuyo prop�sito sea ense�ar a las mujeres a votar y que las capacite en t�cnicas de campa�as pol�ticas y en el proceso legislativo.
El activismo de las mujeres en todos los niveles de la sociedad civil y en el gobierno fortalece a las democracias.
Las mujeres y las ni�as deben tener acceso a la educaci�n primaria. No se les debe impedir el acceso a escuelas secundarias y universidades, ya sea como estudiantes o como profesoras.
Los derechos econ�micos dan a la mujer el control sobre sus activos econ�micos y las ayudan a evitar relaciones sexuales peligrosas y abusivas. Estos derechos son:
° Tener las mismas oportunidades y criterios de empleo que los hombres.
° Protecci�n para no ser despedidas del trabajo en caso de embarazo o matrimonio.
° Participaci�n en ciertos programas, como los de pr�stamos para microempresas y la capacitaci�n vocacional que habilita a las mujeres para generar ingresos.
° El derecho de recibir la misma paga y el mismo nivel de trato y respeto en el trabajo.
Las democracias se deben esforzar por asegurar la salud y el bienestar de las mujeres y las ni�as, y para brindarles igualdad de acceso a programas como los siguientes:
° Cuidado general de la salud, prevenci�n de enfermedades y atenci�n prenatal.
° Prevenci�n del VIH/SIDA, mejoramiento del suministro de servicios de salud a las personas infectadas, y reducci�n de la transmisi�n de la enfermedad de la madre al hijo.
° Combate a los traficantes que inducen a mujeres y ni�as a la prostituci�n o la servidumbre dom�stica forzosas por medio del enga�o, el fraude o la coerci�n.
° Lucha contra el as� llamado turismo sexual, en el que a menudo se explota a mujeres y ni�os.
° Educaci�n a las familias sobre las consecuencias sociales y de salud del matrimonio precoz.
° Apoyo a las organizaciones para v�ctimas, incluso a los centros de atenci�n de crisis por violencia dom�stica y violaci�n.
° Capacitaci�n del personal de polic�a, abogados, jueces y personal m�dico a fin de reducir la violencia dom�stica.
° Eliminar la mutilaci�n genital de las mujeres.